BLOQUE 4: La ortografía y la semántica. (Segunda versión)

BLOQUE 1: ANÁLISIS Y SELECCIÓN

Selección del libro:

He de decir que esta tarea no ha sido sencilla. He tenido que recurrir al consejo y recomendaciones de dos auténticos expertos: un matrimonio con varios hijos y muchos libros entre sus librerías, y a la que recomendaron este libro, y la “aprobación” de una librera de profesión y vocación.

Por las edades de mis hijos aún no me he aventurado en la elección de libros para primaria, pero sí que como indica Irune Labajo en sus recomendaciones para escoger un libro infantil, me he fiado de un experto y he buscado un libro que se adecué a las necesidades e intereses de los alumnos. La recomendación que me hicieron estos padres es la de elegir un libro aún no muy conocido. Cuando lo comentamos a todos nos vino a la mente “los hijos del vidriero”. Un libro que leímos mi colegio, el de enfrente y los de todo el barrio de Chamberí. Y ojo, que no digo que no sea una joya, pero buscaba algo diferente.

La recomendación fue el libro del escritor español Carlos Álvarez de Eulate: “No quiero que me quiten la escayola”. Mi amiga tuvo que comprar este libro para su hijo y le ha servido de ejemplo para varias ocasiones, y la verdad es que tras la lectura, creo que lo voy a usar en muchas cosas de mi vida. ¿Por qué? Porque han puesto palabras en boca de muchas personas que en algún momento de nuestra vida nos hemos sentido así. Yo nunca me he roto un hueso, nunca. Pero una vez, como con unos 12 años me hice un esguince de una forma menos glamurosa de lo que me hubiera gustado, pero entré en clase con mi venda hasta el codo como si luciera el mejor de los complementos, el más deseado, el más buscado y el que sin duda alguna, no pasará inadvertido. Una venda… una escayola hubiera sido ya otro nivel. Recuerdo la de algunos compañeros llena de firmas, frases célebres y dibujos… qué envidia!

 

Ficha bibliográfica:

Título: No quiero que me quiten la escayola

Autor: Carlos Álvarez de Eulate

Ilustrador: David Guirao

Editorial: Mira Editores

Fecha primera edición: noviembre de 2009

Curso en el que me baso para realizar este análisis: cuarto de primaria

 

En cuanto al formato del libro me parece un poco desacertado en cuanto a los colores de la portada y la ilustración. Creo que no representa adecuadamente la intención del libro. Creo que yo nunca me hubiera comprado un libro así y tampoco para mis hijos. El título sin embargo llama mucho la atención. Aún así las tapas son blandas pero las páginas son resistentes al poco cuidado que suelen tener los alumnos de estas edades.

A lo largo de la historia me ha llamado la atención la ilustración del cuento, es algo fría, con colores apagados y con rasgos muy perfilados. Quizás eso me haya hecho pensar que no coincidía con el estilo del autor.

La ilustración si creo que acompaña bien a cada momento de la historia en cuanto al mensaje. Son bastante sencillas de interpretar aunque no coincida con la elección del tipo de dibujo que me hubiera gustado.

La tipografía es de imprenta, adecuada para esta edad y visualmente es un libro sencillo.

Creo que el motivo de la elección de esa portada, de esas ilustraciones responde a que son los gustos de los niños y niñas de esa edad. Seguramente mi estilo ahora mismo sea más infantil y más claro, alegre, amigable… por la costumbre que tengo de leer libros para niños más pequeños.

Análisis del contenido:

Creo que el tema fundamental del libro es la clave de “vivir en grupo”. Las relaciones humanas, los sentimientos que surgen, la necesidad de apego, de ser aceptado, la convivencia. Creo que los 9 años de cuando yo era pequeña no son para nada los de hoy. Entiendo además que esto es algo que nos decimos todas la generaciones. Pero es cierto que yo veo el ocio que tienen ahora, el estilo de vida, la forma en la que se relacionan entre ellos y a través de qué medios, y no, no tiene nada que ver en cómo yo lo hacía.

La importancia de las amistades, de la opinión del resto, de la aprobación de los demás. Se empieza a fraguar en esta etapa de primaria. Ya forman parte de los mayores. Es un momento muy importante porque en cada ambiente de su vida ellos empiezan a tener un rol, con los amigos de las extraescolares, los amigos del colegio son todo su mundo cuando hasta ahora también los hijos de los amigos de sus padres eran media vida. Ahora necesitan tomar decisiones cada día, hay enfados, rencillas, hay preferencias. A Lola le sucede. Ella tiene miedo a tomar decisiones, tiene miedo de perder amistades, de equivocarse. A pesar de la importancia que se le da a la amistad con esa edad y del valor que tiene, parece por otro lado tan frágil, tan efímera. Alguien puede dejar de hablarte  y por supuesto, de ser tu amiga, en cuestión de minutos.

Ese primer contacto en la toma de decisiones. Cómo Lola se ve en la tesitura de escoger, dos deportes, dos amistades. Si escoge el fútbol gana a uno y pierde a otra. Si escoge el baloncesto pierde a uno y gana a otra.

La toma de decisiones es algo para lo que es importante preparar a los niños. A tener opinión, tener criterio, comprender además los motivos que a alguien le llevan a tomar una decisión. El deporte está muy presente en la historia, algo que creo que es importante porque el deporte enseña a nuestros alumnos una disciplina de vida, de cuidados, de alimentación, de esfuerzo, de convivencia. Que todo el mundo debería poder tener al alcance la oportunidad de participar en un equipo o en un deporte individual.

Creo que en esta edad además se toman muchas decisiones que marcan el resto de nuestra vida. Una persona que continúa en un deporte en estos años tiene más probabilidades de continuar cuando sea mayor. La extraescolares ya no son solo un recurso para compatibilizar los horarios de los padres (arma por cierto de doble fila, porque implican los partidos de los sábados), sino que son un interés de los alumnos.

 

La estructura es muy sencilla, fácil de encontrar la introducción y planteamiento cuando Lola acude al hospital por la fractura de su pierna, donde le tratan y le tienen que poner una escayola.

El nudo que corresponde a la trama de ver como Lola ve el impacto de esta novedad en sus ambientes, en su clase, en el colegio, en su casa, la relación con sus allegados, la gente nueva.

Y por último, el desenlace. Vemos cómo experimenta Lola la vuelta a “esa normalidad”. Sin la escayola. Cómo reacciona la gente.

Los personajes:

Lola es la narradora y “vividora” de la historia. Va describiendo a lo largo del libro su vida, su día a día. Su mundo. Esto facilita mucho la lectura a nuestros alumnos. Lola es una persona bastante insegura, con las incertidumbres propias de la edad, con la necesidad de sentirse valorada, incluida dentro del grupo. Una persona comprometida aunque no muy buena estudiante, cosa que le acarrea en casa algunos conflictos. La relación con su hermano tampoco es muy buena, aunque eso es algo con lo que seguramente todos los lectores se sientan más que identificados.

Como personajes secundarios:

La madre de Lola: un personaje necesario. Para los alumnos creo que es importante ver que los padres de todos sus amigos son muy parecidos. Cuando se enfadan, por las cosas que se enfadan. Sus preocupaciones. Como la madre de Lola se preocupa por la caída de su hija y lo que parecía que iba a ser un drama y un motivo de gritos y peleas, se convierte en un momento de preocupación y cariño de su madre.

Luis, el típico hermano pequeño: incordión, que saca de quicio y que sin embargo con la caída de su hermana empieza a ser un poco más responsable y menos travieso.

Juan: el verdadero amigo de Lola. Es un personaje muy importante, que además nos sirve para hacer un poco de autorreflexión a todos. Todos hemos tenido ese amigo que después del verano nos nota un poco diferentes, al que hemos dejado un poco olvidado por los amigos del campamento o de la playa. Ese amigo de todo el año, el primer amigo verdadero, que se puede sentir un poco desplazado cuando ha llegado el primer momento de vivir cosas diferentes.

Lita: esa amiga que rompe los esquemas de la relación de Lola con Juan. Lita es una persona popular, inteligente, adelantada. Que muestra su ayuda a Lola. Parece casi perfecta. Y tiene un gran poder de influencia en Rita. Es un personaje clave, cómo nos afecta conocer a personas más carismáticas, con criterio, opinión… es algo muy bonito de ver en los alumnos pero a la vez muy difícil de gestionar.

De este libro podría sacar muchos valores para comentar, empezaré por amistad:

Creo que es un valor muy importante. Cuidar a los amigos desde pequeños es esencial. Siempre he dicho que dice mucho de una persona la cantidad de amigos que conserva del cole. Después de haber vivido en dos países, trabajar 12 horas al día, ser madre de dos hijos, me parece un auténtico milagro que mis amigos sigan ahí, pero siguen. Creo que nuestra base es buena, y me encantaría poder ayudar a que mis alumnos los cuidaran. Es una etapa clave: con 8 y 9 años nuestros amigos son los que son, desde pequeños. Pero a partir de los 10,11 y 12 años hay otros factores que influyen, la popularidad, el que me lleven la contraria o me den la razón. Lola empieza a experimentar estos episodios. Juan siempre ha estado ahí, pero Lita es la novedad, eso también hay que aprender a gestionarlo. Además es un momento en el que parece que la exclusividad de la amistad los niños la llevan muy en serio. Es más difícil ver grupos unidos. Se ven más amigos íntimos.

Preocuparse por los demás: es un bonito gesto que después de que un compañero haya tenido una caída la gente se preocupe por el. En el caso de Lola recibe llamadas de sus compañeros interesándose por su estado. Eso además de reconfortar te hace darte cuenta de que la gente se preocupa. Empieza una fase de menos “yo” y más los demás.

Compañerismo: en los pequeños detalles, en el aula, en casa cuando llega y cómo la reciben.

La buena relación en la familia y en la familia con el colegio: creo que es la base para que los alumnos estén contentos en el colegio. No echar culpas al profesor, ni a las instalaciones. Cuidar de Lola es ahora lo importante.

 

Como contravalor podría indicar la falta de seguridad de Lola, la toma de decisión. La continua necesidad de aceptación de otro. Parece que a vida o muerte tiene que elegir cuando le van a quitar la escayola. Esa falta de seguridad es muy típica de esta edad. Aún estamos creado nuestros cimientos y nuestras decisiones, pocas son las que hay que tomar, se tambalean bastante.

Esa falta de valor, hace como Lola que la mentira aparezca. El querer huir, escondernos. No responder a las llamadas. Una reacción muy normal por otro lado.

 

El lenguaje del libro es muy sencillo. Acompaña a la historia una narrativa muy sencilla. Es una niña contando lo que siente o ve. Frases sencillas, breves, con párrafos muy sencillos. Muy importante para poder hacer una lectura comprensiva y que los detalles vayan afianzando el mensaje del autor. Es un lenguaje tierno, muy sensible en algunos momentos, muy fácil de ponerte en el lugar de Lola, como reacciona, como vive las cosas…

Las estructuras gramaticales son muy sencillas y el tiempo verbal facilita la comprensión.

Como conclusión me gustaría aportar que es un libro que utilizaría con mis alumnos por tres cosas claves:

La sencillez. Con 9 años creo que es importante que aprendan a disfrutar leyendo. Un libro sencillo, de cosas cotidianas, realistas y de su dia a día.

La importancia de la amistad: de ver como las cosas se solucionan. La importancia de cuidar a los amigos, las relaciones. Creo que es importante que ayudemos a nuestros alumnos a entender y vivir las amistades sanas. La importancia del respeto a los demás. A los que son diferentes, a los que no son populares. Este tema me parece esencial en momentos como los que vivimos hoy en día por la diversidad que tenemos en las aulas y también la problemática del acoso escolar. Las amistades sanas, que hacen que seas mejor como en el caso de Lita y su ayuda a Lola en los estudios.

Y por último, porque me parece un libro alegre, esperanzador. Lola no se encontraba a gusto, no estaba dentro del grupo. Una escayola, un cambio de mente por su parte y por la de los demás, hace que el final del libro, el desenlace, sea una lola contenta, integrada, conocida, valorada. Creo q es esencial que les ayudemos, a hijos y a alumnos a pensar en los sentimientos del otro, en la situación del otro. Creo que este libro es optimista, sencillo y realista.

Bibliografía:

-          ÁLVAREZ DE EULATE ALBERDI, Carlos. “No quiero que me quiten la escayola”.

-          Labajo I. Guía de trabajo.